Tras sufrir un accidente de tráfico, haber avisado a las autoridades y acudido a los servicios médicos en caso de necesitarlos, hay una serie de pasos que dar para solicitar una indemnización por daños o lesiones, si creemos que tenemos derecho a reclamarla.

En este punto insistimos en la importancia de contar con la asistencia de un abogado especializado en accidentes que nos acompañe en cada paso, encargándose de llevar a cabo los trámites necesarios para que el proceso se haga dentro de los plazos que establece la ley y con todas las garantías de que se aporta la documentación e información necesarias para solicitar la indemnización.

◗ Primer paso, ponerse en contacto con su aseguradora

El primer paso es ponernos en contacto con nuestra aseguradora, esto puede hacerlo usted o pedir a su abogado que se encargue de ello. Asegúrese de conservar toda la documentación e información médica que reciba, puesto que tendrá que enviarla a la aseguradora.

◗ Segundo paso, reclamar la indemnización

Enviada la documentación correspondiente, la compañía de seguros procederá a valorar la información médica, es decir, las lesiones que haya podido sufrir en el accidente, así como las posibles secuelas que estas lesiones puedan producirle con el paso del tiempo.

Tras valorar la información, la aseguradora puede denegarle la indemnización. O puede hacerle una oferta motivada de indemnización, teniendo en cuenta una serie de criterios objetivos, así como las propias circunstancias del accidente. Cabe señalar que esta oferta de indemnización suele estar calculada a la baja (ya dijimos que las aseguradoras velan, ante todo, por sus propios intereses).

Aquí se abren dos posibilidades y su abogado la aconsejará cuál es la más adecuada en función de su situación particular.

La primera posibilidad es aceptar la oferta de indemnización hecha por la aseguradora, es decir, que está de acuerdo con la cuantía ofrecida. En este caso, el cobro suele producirse bastante rápido.

La segunda posibilidad es no aceptar la oferta de indemnización, en cuyo caso, pasaremos al siguiente paso en el proceso de reclamación de la misma.

◗ Así se valoran los daños

Antes de seguir, merece la pena señalar cómo se valoran en España los daños y perjuicios que sufren las víctimas de accidentes de tráfico y que determinan la cuantía de las indemnizaciones que pueden percibir.

La valoración se hace a través de un baremo que se actualiza y publica todos los años en el BOE y en el que se tienen en cuenta una serie de criterios (secuelas producidas, días de baja, pérdida de calidad vida, edad, etc.) con una cantidad de puntos asignados. Estos puntos se van sumando y su total determina la cuantía económica de la indemnización.

Aparte de los daños físicos, también se incluye el perjuicio patrimonial, que incluye los gastos de asistencia sanitaria futura, prótesis y órtesis, así como la rehabilitación domiciliaria y ambulatoria. También se incluyen los gastos que puedan generar la pérdida de autonomía personal, que conlleva la necesidad de ayuda técnica, la adecuación de la vivienda o la necesidad de contratar con la ayuda de una tercera persona.

Además, también valora la posibilidad de sufrir una incapacidad total o parcial, es decir, la imposibilidad para la víctima del accidente de seguir realizando su actividad profesional y, por tanto, dejar de recibir rentas del trabajo.

Su abogado especializado en accidentes de tráfico e indemnizaciones se encargará de consultar este baremo y, en relación con su informe médico y la valoración de la aseguradora, determinar si la indemnización ofrecida está acorde al mismo.

◗ Tercer paso, si no está de acuerdo con la aseguradora

Como decíamos, si no está de acuerdo con la cuantía de la indemnización que le ofrece la aseguradora, la ley le permite, si cumple una serie de requisitos, solicitar un informe médico contradictorio al de la aseguradora, que emite el Instituto de Medicina Legal de la Comunidad Autónoma donde resida.

Es importante señalar que este informe es gratuito para la víctima, ya que los gastos del mismo debe cubrirlos la propia aseguradora.

Se trata de una valoración independiente de las lesiones sufridas que puede conseguirle una indemnización más cercana a la realidad y, por tanto, más favorable para usted.

En el caso de no cumplir con los requisitos necesarios para solicitar el informe del Instituto de Medicina Legal o si sigue estando en desacuerdo con la indemnización ofrecida por la compañía aseguradora, todavía podrá reclamar por la vía judicial.

◗ Cuarto paso, la vía judicial

Si su abogado especializado en accidentes de tráfico valora positivamente la posibilidad de conseguir en vía judicial la indemnización que por ley le corresponde, se ocupará de llevar adelante todos los trámites necesarios para ello, desde la presentación de la demanda, hasta la recomendación de un perito forense particular para realizar un nuevo informe médico de sus lesiones y posibles secuelas.

¿Por lo civil o lo penal?

Actualmente, la mayoría de demandas por reclamaciones de indemnizaciones de accidentes de tráfico se tramitan por la vía civil. El plazo para iniciar esta reclamación por la vía judicial es de un año desde el momento que recibe el alta médica o, en caso de que se hubiera producido un fallecimiento, desde la fecha del mismo.

A la vía penal solo se recurre cuando el accidente ha sido provocado como comisión de un delito, por ejemplo, la conducción bajo los efectos del alcohol. En este caso, el procedimiento penal se tramita como una pieza separada de responsabilidad civil.